En una noche lluviosa en Ponte di Legno, Arno Lietha ganó su segunda carrera de velocidad consecutiva. Célia Perillat-Pessey ganó la carrera femenina por primera vez.
Las nubes bajas, la lluvia en el aire y las carreras nocturnas hicieron que la segunda carrera Sprint de la temporada fuera espectacular. Una carrera que vio algunos desafíos técnicos para algunos atletas y choques en casi todas las eliminatorias. La nieve húmeda fue un problema para las pieles, además el circuito técnico se le atragantó a más de uno.
La carrera fue muy disputada, la gran dominadora actual Emily Harrop no llegó a la final y Giulia Murada perdió el triunfo a pocos metros de la meta.
Marianna Jagerčíková de Eslovaquia marcó el ritmo de la carrera final femenina y lideró la carrera hasta la casi el final. Entonces la atleta italiana Giulia Murada la adelantó y manejó perfectamente la última parte de la subida. Tenía un buen hueco para la bajada pero se cayó en los últimos metros y perdió el triunfo.
Célia Perillat-Pessey fue la primera en cruzar la línea de meta e inmediatamente se echó a llorar. Fue su primera victoria en la Copa del Mundo para la francesa de 25 años.
Después de las dos primeras carreras de la temporada, Perillat-Pessey es la líder general.
La final masculina también acarreó una batalla emocionante. En la segunda parte de la subida, Thibault Anselmet recortó la ventaja de Arno Lieth, pero luego tuvo un problema con sus pieles y terminó fuera del podio. Nicolo Ernesto Canclini (Italia) tuvo un problema similar, pero logró controlar la situación para terminar en tercer lugar por detrás de Iwan Arnold.
Arno Lietha lideró todo el camino de principio a fin. Al final, ganó con una gran diferencia y confirmó que sería uno de los a batir en las carreras de velocidad esta temporada.
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