La esperada conexión entre las estaciones de esquí de Astún y Candanchú se materializará a partir de otoño de 2026, gracias a un innovador proyecto de transporte por cable que promete revolucionar el turismo en el Valle del Aragón. Este ambicioso proyecto, enmarcado dentro del Plan Pirineos del Gobierno de Aragón, no solo mejorará la experiencia de los esquiadores, sino que también contribuirá a la desestacionalización de la actividad turística, creando nuevas oportunidades de desarrollo económico para la región.
El proyecto: Una telecabina de última generación
La conexión entre Astún y Candanchú se realizará mediante una telecabina monocable desembragable que recorrerá los 3,616 metros que separan ambas estaciones en tan solo 12 minutos. En su primera fase, la telecabina contará con 24 cabinas, capaces de transportar hasta 600 personas por hora, y alcanzará su capacidad máxima de 2,400 personas por hora en 2035, cuando se instalarán 96 cabinas.
Las estaciones estarán ubicadas en el aparcamiento de Candanchú, a una altitud de 1,565 metros, y la llegada será en la estación superior en Astún, a 2,022 metros, con una parada intermedia. Aunque la estación intermedia no recogerá ni permitirá la bajada de pasajeros, servirá para realizar un cambio de dirección en el recorrido. El sistema contará con 19 torres de soporte, distribuidas en dos tramos: 7 en el primero y 12 en el segundo.
Impacto económico y social
El proyecto, que cuenta con una inversión de 35 millones de euros financiados por el Gobierno de Aragón, fondos europeos y la Diputación Provincial de Huesca, está diseñado para traer importantes beneficios a la región. Se espera que entre 24,000 y 36,000 visitantes utilicen la telecabina durante los primeros tres años, y la cifra podría aumentar hasta 45,500 visitantes anuales en su décimo año de operación
Además de atraer más esquiadores, con un incremento estimado de entre 0.3% y 1.2%, el telecabina también potenciará el turismo en verano, con un crecimiento esperado de entre el 6% y el 12%. Este impulso económico se reflejará en un impacto directo de entre 2.1 y 3.7 millones de euros durante el primer año, cifra que aumentará a entre 3.2 y 4.8 millones en el tercer año.
Un impulso a la movilidad sostenible
Uno de los principales objetivos del proyecto es reducir la dependencia de los vehículos particulares en la zona, mejorando la accesibilidad entre las dos estaciones y disminuyendo las emisiones de CO2. Esto no solo beneficiará al medio ambiente, sino que también incrementará la seguridad de los esquiadores al reducir el tráfico en las carreteras de montaña.
Más allá del esquí: Diversificación turística
La telecabina no solo operará en la temporada de invierno, sino también durante 4 meses en verano, lo que permitirá a los turistas disfrutar de una amplia oferta de actividades al aire libre, como senderismo, ciclismo de montaña y rutas panorámicas. Esto contribuirá a la desestacionalización del turismo, permitiendo que el Valle del Aragón mantenga su atractivo durante todo el año.
Un futuro prometedor para el Valle del Aragón
La unión entre Astún y Candanchú no solo mejorará la experiencia de los esquiadores, sino que también servirá como catalizador para el desarrollo sostenible de la región. Con un impacto positivo en el empleo local, la creación de nuevas oportunidades turísticas y un enfoque en la movilidad sostenible, este proyecto está destinado a consolidar al Valle del Aragón como un destino turístico de primer nivel en el Pirineo aragonés.
Este proyecto marca el inicio de una nueva era para el turismo en el Pirineo Aragonés, ofreciendo a los visitantes una experiencia única en un entorno natural incomparable. ¡El futuro del esquí y del turismo en el Valle del Aragón promete ser brillante!
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