El esquiador austríaco reina en la Copa del Mundo de esquí alpino por cuarto año consecutivo tras imponerse en el eslalon de Meribel.
Aunque tenía el triunfo final asegurado tras la renuncia a participar de Kjetil Jansrud, el austríaco Marcel Hirscher quiso hacer historia a lo grande al adjudicarse el eslalon de Meribel (Francia), la última prueba del año, y conquistar también el globo de la especialidad.
Nadie había conseguido la gesta que Hirscher ha firmado en Meribel: dominar la general de la Copa del Mundo de esquí alpino por cuarto año consecutivo. Y lo ha hecho desde lo más alto del podio.
El astro salzburgués iguala los cuatro triunfos de Gustav Thöni (1971, 1972, 1973 y 1975-, del suizo Pirmin Zurbriggen (1984, 1987, 1988 y 1990) y del también austríaco Hermann Maier (1998, 2000, 2001 y 2004).
El esquiador con más títulos general de la Copa del Mundo es Marc Girardelli, nacido en Lustenau (Austria) pero que ganó cinco veces como luxemburgués en 1985, 1986, 1989, 1991 y 1993.
Hirscher todavía tenía un último reto, asegurarse también la clasificación de eslalon, cosa que consiguió al ganar la última prueba del año con 83 centésimas de ventaja con respecto al italiano Giuliano Razzoli y un segundo y 9 centésimas sobre el ruso Alexander Khoroshilov, tercero en el podio final de la temporada.
Hirscher arrebató el honor al alemán Felix Neureuther, que solo pudo ser duodécimo.
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