Las precipitaciones en forma de nieve fueron las protagonistas de la Copa del Mundo en Grandvalira, el día se despertó con una intensa nevada que hizo atrasar la competición 3 horas, hasta las 13:30, momento en el que si se disputó la competición.
Las primeras corredoras disfrutaron de buena nieve, pero a partir de la décima competidora la nieve volvió a hacer acto de presencia, volviendo la pista más lenta y impidiendo mejorar los tiempos de las primeras.
Federica Brignone (ITA) se alzó con la victoria, superando Laurenne Ross (EE.UU.) en 0.13 segundos. Tercera fue la austríaca Tamara Tippler.
Fue el quinto podio por Brignone esta temporada, pero su primer podio en Super-G.
Federica comentaba con Soloski que “Ha sido una carrera loca, no me lo puedo creer, pero he esquiador bien y he apretado a tope toda la bajada.”
La carrera ha estado marcada por una caída aparatosa pero sin consecuencias de Lindsey Vonn, que ha obligado a parar la competición varios minutos. A partir de ese momento, debido a la intensa nevada los tiempos han aumentado y ninguna de las corredoras ha conseguido mejorar los cronos de las mejores.
El mano a mano de Lindsey Vonn y Lara Gut (SUI), no ha sido tal y la americana no ha acabado y la Suiza no ha podido pasar del 16 lugar, ahora solo les separan 8 puntos, favorables a Lindsey.
Mañana la vuelve la competición a Grandvalira, con la Combinada Nordica.
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